Estaba cantado. Unidad Progresista (UP), partido que lidera Mario Loreto, verdadero factotum del grupo, y al que pertenece el actual presidente de la ONCE, José María Arroyo, ha arrasado en las elecciones de la Organización Nacional de Ciegos que tuvieron lugar ayer. UP ha conseguido la práctica totalidad de los votos, mientras que los otros dos partidos que se presentaron a los comicios, Unión de Afiliados Independientes (UAI) y Alternativa Social, han pasado totalmente desapercibidos.

   Los que sí dieron ayer la nota, y mucho, fueron Miguel Durán y sus hombres, los de la Plataforma Unitaria de Encuentro para la Democratización de la ONCE (PUEDO), que fueron desalojados de la Delegación del Gobierno de Barcelona por la Policía. Al grito de `pucherazo´ y a modo de protesta, los miembros de PUEDO se encerraron en el Consejo del Protectorado, en la madrileña calle de José Abascal, y en las delegaciones de Gobierno de Oviedo y Barcelona.

   La plataforma pedía la intervención del Ministerio de Trabajo, "que ha consentido un enorme fraude electoral en la Organización Nacional de Ciegos. Zaplana nos aseguró que tendríamos una resolución sobre la actual situación de la ONCE antes del 16 de mayo, pero, a día de hoy, no nos han dicho nada. Sólo nos han dado largas", dicen. Los medios de comunicación, al igual que el Ministerio, tampoco se han hecho eco del `escándalo del cupón´ denunciado por este diario.

   Este silencio ha coincidido con una agresiva campaña de publicidad de la Organización de Ciegos. Según la consultora Infoadex, en los cinco primeros meses de este año, la organización se ha gastado 42 millones de euros en publicidad.

   En la dirección de la ONCE lo niegan todo. En primer lugar, aseguran que el Ministerio está con ellos y que no han recibido ningún toque de atención del mismo. Y, segundo, "tenemos un presupuesto anual en publicidad de unos 20 millones de euros y, a día de hoy, nos hemos gastos unos seis millones. Infoadex siempre nos da más, pero esos datos son erróneos", explica un portavoz oficial.

   El encierro que organizó ayer PUEDO tiene sus precedentes. Ya el 29 de mayo, los militantes de esta plataforma montaron una manifestación/encierro en Ortega y Gasset 18, sede del Consejo General de la ONCE, que requirió de la presencia de cuatro furgones de la Policía. En ella se distribuyó un comunicado muy duro con el actual número uno de la organización, José María Arroyo.

   Tras las elecciones, tal y como adelantó El Confidencial, el nuevo presidente, en sustitución de Arroyo, será Vicente Ruiz, actual director general adjunto a Miguel Carballeda, que es, a su vez, el director general de la organización. No obstante, tras el comunicado del 29 de mayo, Arroyo está presionando a Loreto para seguir un año más en el cargo y defenderse así de estas acusaciones.

   En dicho comunicado se decía, entre otros comentarios, lo siguiente: "José María Arroyo Zarzosa se prepara un retiro dorado en una casa que le ha costado 280 millones de pesetas. Con nuestro dinero se han invertido más de 600 millones de pesetas de la Fundación ONCE en su pueblo, Melgar de Fernamental, para tener una calle a su nombre. Con la venta de nuestros cupones tiene dos Audi A8, el último comprado en febrero de este año; que le ha costado a la ONCE 16 millones de pesetas (...). En la urbanización donde vive, además de la vigilancia privada, tiene un servicio las 24 horas del día, de los 365 días del año de VINSA y pagado por la ONCE, compuesto por tres personas...".